Las dos universidades públicas más grandes de Arizona están lidiando con ramificaciones para sus departamentos deportivos, incluidos cambios de personal en los niveles superiores de sus departamentos.
El lunes por la noche, se supo que la Universidad de Arizona cambiaría su liderazgo. El director atlético Dave Heeke se marcha, reemplazado por el ex entrenador de softbol Mike Candrea.
Candrea liderará de forma interina y se espera que Heeke deje oficialmente su puesto el 2 de febrero.
El cambio se produce mientras la universidad se prepara para afrontar una investigación sobre cómo perdió la pista de 240 millones de dólares, que la propia universidad sacó a la luz en noviembre.
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«Ciertamente, en términos de óptica, es una gran preocupación», dijo Shane Dale, copresentador del podcast Wildcat Country. «Y aquellos que dicen que el atletismo influye demasiado en lo que sucede en estas universidades miran esto y dicen: «¿Qué pasó con los 240 millones de dólares?»
Cuando se reveló el déficit de financiación el año pasado, el presidente de Arizona, Robert Robbins, se refirió al asunto como un «error de cálculo».
Como resultado de ese error de cálculo, comenzaron los llamados «recortes draconianos» en el campus de Tucson, incluido un congelamiento de contrataciones y una pausa en los proyectos de construcción anticipados.
En cuanto a lo que viene a continuación, Dale dice que no está descartado que puedan haber más cambios en el horizonte.
«Nunca se sabe, cuando llegue la próxima temporada deportiva, podríamos ver una administración completamente diferente en Arizona, no sólo entrenadores de fútbol, sino directores deportivos y presidentes de escuelas», dijo.
Este jueves se llevará a cabo una auditoría del departamento de deportes entregada a la Junta de Regentes, dijo Dale.
Más cerca de casa, la Universidad Estatal de Arizona sigue buscando un nuevo líder para su departamento de deportes.
El ex director atlético de ASU, Ray Anderson, renunció en noviembre después de una década en Tempe. Su época en la universidad vio muchas controversias, algunas de las cuales estaban relacionadas con sus decisiones de contratación.
Desde entonces, no ha habido ningún anuncio sobre un nuevo director deportivo en la escuela.
En términos del impacto real en ambas universidades, Dale dice que podría dañar temporalmente su imagen. Sin embargo, cree que esto no impedirá que los jugadores finalmente se pongan la camiseta del equipo, ya que es más importante gestionar el equipo que la universidad.
